Nerea Crespo Díez es una chica sencilla. Esta jóven de 20 años está estudiando Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Su afición a la lectura le condujo a su afición a la escritura. Bendita Nerea es su blog, un popurrí de posts que, juntos, tienen mucho sentido y una gran personalidad. Bien podría considerarse uno de los muchos fanzine de poesía y prosa que existen pero, a pesar de compartir filosofía, no comparten formato. Gracias Bendita Nera ha conseguido dar voz a sus pensamientos, ideas y sentimientos. Ha publicado también en tenían veinte años y estaban locos.
Tu blog no se puede considerar un cuaderno de bitácoras personal puesto que la periodicidad de actualizaciones no es rígida. ¿Cómo lo definirías?
Lo definiría casi como mi cuaderno personal. En él vierto todo lo que me sale de dentro, a veces bueno y otras no tanto. Lo utilizo cuando necesito desahogarme, liberarme de un poema que conlleva ciertas cosas o simplemente compartir, por eso no considero la periodicidad algo necesario. Es casi un cajón desastre, en el que hay mil cosas, pero sobre todo parte de mí.
"Algo mayor me empezó a gustar Bécquer, Espronceda, Neruda..., y ¡Sabina! aunque pueda sonar aberrante meterlos en el mismo saco"
¿Cuándo, una chica tan joven como tú, empieza a interesarse por la poesía?
Pues no recuerdo la edad exacta... Cuando era pequeña mis padres me leían poesía, y me acuerdo de que mi madre me hizo aprenderme "Sonatina", de Rubén Darío, y la verdad es que por aquel entonces ya me encantaba. Algo mayor me empezó a gustar Bécquer, Espronceda, Neruda..., y ¡Sabina!, aunque pueda sonar aberrante meterlos en el mismo saco. Pero, gracias a él escribí mi primer poema. Eran unos versos para clase, y me inspiré en Sabina, al escribirlos me imaginaba que estaba escribiendo una de sus canciones..., y el resultado quedó bien y todo.
¿Cuál es tu musa de inspiración?
En general musa ha sido siempre bastante abstracta, la tristeza quizás. Cuando escribo suele ser porque estoy triste, o hay algo en mi interior que no va bien. A veces también me obligo a escribir, es una manera de coger unos prismáticos, avistar a “la musa” y raptarla. Aunque considero que algunos de esos poemas, a los que yo llamo “huérfanos”, pueden tener cierta calidad, me gustan más los que salen de las entrañas y de hecho, en realidad, todos tienen esa parte visceral (aunque yo no lo quiera reconocer). Así que en conclusión podría decir que la musa ha sido la tristeza, el amor o la vida en general, o incluso a quien van dedicados esos poemas, que al fin y al cabo es la persona que me lleva a escribirlos. Eso va por etapas... Ahora escribo muy poco, pero porque no tengo tristeza en mi vida. Simplemente escribo hacia lo que me provoca un pensamiento determinado, hacia un sentimiento o cuando tengo un día bajo. Pero como ya he dicho, ahora son pocos... Estoy en pleno bloqueo artístico, y lo poco que escribo, es tan feliz que lo veo excesivamente cursi.
"El poder leer lo que piensa la gente del trabajo que realizas es genial, y generalmente muy satisfactorio"
Poco a poco has ido dando a conocer tus poesías a través de la plataforma que es tu blog. ¿Has notado alguna repercusión que hayan tenido tus poemas en tus lectores? ¿Algún tipo de feedback quizá?
Repercusión como tal, me extraña. Ojalá fuera así, pero dudo que a alguien le haya removido como para repercutirle. Feedback, sí, y bastante además. Facebook y Twitter son muy buenas herramientas para dar tu medio a conocer, las mejores diría yo. La mayor parte de interacciones las he tenido a través de las redes sociales, aunque han surgido algunas también mediante el blog. El poder leer lo que piensa la gente del trabajo que realizas es genial, y generalmente muy satisfactorio. Me ha llegado a escribir gente con la que llevaba sin hablar muchísimo tiempo, diciéndome que me suele leer, y eso emociona, al igual que cuando te escribe un absoluto desconocido felicitándote por tus poemas.
Tengo entendido que tienes llevas escribiendo un poemario mucho tiempo y que tienes pensado publicarlo pronto. ¿Es cierto?
Cierto es..., y pensado lo tenemos, pero creo que en estos momentos es muy complicado publicar. Intentando mirarlo desde con la mayor objetividad posible, creo que el poemario, que está escrito junto a Claudia G. Benlloch, tiene poemas muy buenos. Hay algunos que me gustan más y otros menos, obviamente, pero en general creo que el proyecto está muy bien. Rompe un poco con la poesía de ahora, sobre todo los poemas de Claudia, que están escritos prácticamente todos en rima... Y eso es bueno, es bueno romper y presentar dos estilos tan diferentes como son los nuestros. También es interesante leer entre líneas ver hacia quién van dirigidos los poemas, porque son a personas muy diferentes.
Es difícil que hagan caso a unas chicas como vosotras, sin ningún tipo de referencia, en una editorial. ¿Tenéis algún as en la manga?
La verdad es que no. Ahora mismo el tema lo tenemos bastante parado, espero que a la vuelta de Navidad nos pongamos las pilas y empecemos a tocar puertas. Como lo de la editorial lo vemos bastante complicado hemos pensado también en presentarlo a concursos y a bajo último recurso autoedición...
No se si conoces el caso de Mónica Lozano. ¿Tienes alguna esperanza de que la plataforma de tu blog pueda dar unos frutos tan maduros como los de Mónica y poder dedicarte a tu pasión?
Conozco su historia, muy interesante... Esperanzas tengo pocas, porque creo que tienes que presentar algo innovador y sobre todo bastante concreto, cosa que mi blog no tiene, porque como ya he dicho antes es una marabunta de cosas... Pero quién sabe, ¡ojalá! La poesía es una de mis pasiones, pero ahora mismo estoy algo perdida en ese sentido, porque creo que tengo unas cuantas. El periodismo cultural es algo que veo más asequible (aunque el sector tampoco es que esté para tirar cohetes...), porque además engloba también el tema de la poesía y ambas materias son compatibles. Pero si el día de mañana pudiera dedicarme únicamente a escribir, y vivir como yo quiero vivir de ello, sería feliz.
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